Cuando voy solitario por los caminos
recuerdo aquellos tiempos de pasión
porque en aquella primavera,
nos conocimos los dos.

Tú, dulce, hermosa, atrevida,
y yo, tímido y asustadizo.

Cuando voy solitario por los caminos
pienso en ti, pienso.
Pienso en los rayos dorados del sol,
cuando se fundían en tu rostro,
pienso en la brisa de primavera,
cuando acariciaba tu pelo,
pienso en el agua dichosa,
que rozaba tus labios,
pienso y solo en ti.

Porque quiero que vuelvas,
vuelve, amada mía,
porque sin ti,
ni mi propia vida será mía.